Crucero desde Tarragona en el Costa Victoria de Costa Cruceros en 2018
Con 14 kilómetros de Costa, Tarragona se antoja como uno de los más bellos enclaves del Mediterráneo para iniciar una experiencia de crucero. La apuesta de Costa Cruceros por Tarragona como puerto base de su buque Costa Victoria se debe al éxito conseguido la temporada anterior con el embarque en la ciudad catalana del Costa neoRiviera. Además de su privilegiado clima y de un patrimonio cultural capitaneado por sus tres declaraciones de Patrimonio Mundial de la UNESCO, el Port de Tarragona se ha dotado de servicios especializados para hacer de la experiencia de embarcar desde allí una parte fundamental del viaje.
Esta primavera y verano, el Costa Victoria zarpará desde Tarragona para realizar cruceros por el Mediterráneo con escalas en Savona y también en las islas más bellas del Mare Nostrum, Cerdeña, Mallorca, Menorca e Ibiza.
Con capacidad para albergar a 2394 pasajeros y 790 tripulantes, el Costa Victoria destaca por su diseño clásico y su decoración elegante. Ha sido renovado recientemente para dotarlo de un estilo fresco y contemporáneo. Entre sus servicios y opciones de ocio destacan sus 10 bares, 3 restaurantes, 4 jacuzzi, salón de belleza, spa, discoteca, casino, teatro y zona de tiendas.
Dispone de paseos panorámicos, cuenta con obras de arte a bordo e incluso con una elegante Concorde Plaza en alta mar. Dispone de piscina interior cubierta y de centro de fitness a bordo.
Itinerario del crucero del Costa Victoria desde Tarragona
Desde la Costa Daurada zarpa el Costa Victoria los viernes desde finales de mayo de 2018. Antes de zarpar, es importante saber que conviene reservar un día antes de navegar o a la vuelta del crucero para poder disfrutar de Tarragona y de todas las opciones que ofrece para descubrir como su legado histórico artístico -uno de os más importantes conjuntos arquitectónicos de la época romana en el Mediterráneo- o la diversión de PortAventura o FerrariLand.
Savona, la Ciudad de los Papas
La primera escala del Costa Victoria es Savona. Es el tercer puerto más importante de la región de Liguria y es conocida como La Ciudad de los Papas debido a que de la familia Della Rovere originaria de Savona surgieron dos Papas -tío y sobrino- Sixto IV y Julio II. El primero fue el promotor de la Capilla Sixtina, el segundo fue mecenas de Rafael, Bramante y Miguel Ángel.
La escala de crucero en Savona permite descubrir lugares como la Torretta en Piazza León Pancaldo, del siglo XIV, y la única capilla Sixtina que existe además de la del Vaticano. Sin duda, para los apasionados del arte es una experiencia única que vale la pena vivir.
Olbia, la Ciudad Feliz
En la bellísima Costa Smeralda se ubica la ciudad de Olbia, bautizada por los griegos como Terranoa – que significa Ciudad Feliz-. Fue asentamiento romano y un importante epicentro de intercambio comercial.
Es muy agradable pasear por el centro de la ciudad y descubrir plazas como la de la Reina Margarita o la Piazza Giacomo Matteotti. Otros lugares que vale la pena descubrir son la Via Acquedotto y los restos de la antigua muralla púnica; el Museo Arqueológico Nacional y su colección de piezas de la cultura sarda o la Catedral en honor a San Simplicio.
Los amantes de las compras pueden elegir desplazarse a Porto Cervo y descubrir uno de los lugares más encantadores de la isla.
Mahón y la cultura talayótica
La próxima escala del Costa Victoria en su crucero desde Tarragona sería Mahón, el puerto enclavado en la isla de Menorca, el primer lugar de España en amanecer. Menorca es desde 1993 Reserva de la Biosfera y es un lugar tranquilo y en el que disfrutar de la cultura y la naturaleza en estado puro.
Desde 2.000 años antes del nacimiento de Cristo se cree que ya había presencia humana en la isla de Menorca. Se ha denominado ese período hasta el 1.400 a.C. como período pretalayótico. En ese momento, surgen las construcciones funerarias más identificativas de Menorca y que todavía se conservan: las navetas.
La naveta des Tudons es una de las más famosas y visitadas por los turistas que descubren la cultura pretalayótica y talayótica en Menorca. Son recintos funerarios colectivos que tienen una forma singular y propia de este territorio insular.
Maó es el principal puerto de cruceros de Menorca. En la capital insular, los pasajeros pueden disfrutar de una ciudad amigable, con la luz del Mediterráneo y con una magnífica oferta cultural, gastronómica, artística y paisajística.
Mahón o Maó es uno de los mejores puertos naturales del mundo. Esta custodiado por la Fortaleza de la Mola -joya de la arquitectua militar del s.XIX-, el puerto de Maó alberga algunos tesoros como su sirena, obra de Leonardo Lucarini o el Castillo de San Felipe, herencia de las presencias británica y francesa en la isla.
Se puede aprovechar la escala en Maó par conocer recursos como el Bastión de Sant roc, la Iglesia de Santa María de Maó -y su órgano del siglo XIX con 4 teclados y más de 3.000 tubos con excepcional calidad sonora y mecánica así como la historia de su traslado a la isla durante las Guerras Napoleónicas-; o descubrir la historia del reloj del Ayuntamiento aportado por el gobernador inglés Richard Kane.
Si además del puerto de cruceros de Maó -o Mahón- se quiere optar por conocer algunos de los recursos turísticos más atractivos de la isla de Menorca, se puede escoger entre alguna de estas opciones como conocer los restos megalíticos de la isla de Menorca: las navetas o construcciones funerarias, como la Naveta des Tudons; los talayots y las taulas, toda una lección de historia al alcance del viajero, las playas y calas de Menorca como Cala Turqueta, Cala Macarella, Cala Macarelleta Escorxada, Binigaus o Pregonda son algunas de las calas y playas más conocidas, pero Menorca tiene 70 playas y 216 km de costa.
Otros pueblos y recursos que vale la pena conocer durante la escala de crucero en Mahón son Binibeca, Ciutadella, el Monte Toro, la Cosa d’en Xoroi o S’Albufera des Grau.
Los apasionados de la gastronomía tienen la Ruta del Queso Mahón-Menorca; la Ruta del Vino de Menorca o la Ruta de la Gastronomía Marinera como reclamos fundamentales. Aprovechar para comprarse unas abarcas también suele ser un must si haces escala en Mahón.
Ibiza, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO
Desde 1999 la isla Balear de Ibiza cuenta con esta figura de protección digna de una ciudad tan mágica y especial como es Ibiza. En sus 210 kilómetros de playas se puede sentir la veradera esencia del Mediterráneo.
Casi tres mil horas de sol al año avalan a este destino que tiene, sin embargo, mucho más que arenales. Zonas de compras y moda adlib, mercadillos típicos, una zona antigua preciosa o una gastronomía mediterránea basada en los productos del mar forman parte de los reclamos de un destino que enamora a turistas y cruceristas.
Palma de Mallorca, lujosa y auténtica
Recalar en la mayor de las Islas Baleares es una experiencia lujosa en sí misma. Un destino único en el que la costa es la protagonista de las diversas experiencias que permite la isla. Gastronomía marinera, deportes acuáticos, sol y playa, moda, diversión, fiesta, montaña, pueblos pintorescos. Mallorca es eso y mucho más.
No hay que dejar de probar si se visita Mallorca una caldereta de peix o de langosta, una coca de patata, un delicioso zumo de naranja de sus huertos y un atardecer en la sierra de la Tramontana cuando el sol tiñe de tonos anaranjados la montaña.
Visitar el casco antiguo de la ciudad y su Catedral gótica en honor a Santa María forma parte de la tradicional visita a la ciudad en la que el sol y el mar son también el destino.
Embarca en tu crucero en el Costa Victoria desde Tarragona y no pierdas ocasión de visitar todos estos lugares y coleccionar en ellos tus propias vivencias. Si ya has estado en alguno de ellos, cuéntanos en los comentarios qué te ha gustado más del destino y qué recomiendas visitar a los nudossfriends.
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Crucero desde Tarragona: excursión a Ferrari Land y a PortAventura