¿Puedo hacer un crucero embarazada?
Sí. Se puede ir de crucero si estás embarazada pero lo más habitual es que las navieras fijen un período máximo de gestación a partir del cual no se puede embarcar. Por lo general el límite permitido suele ser de 24 semanas.
Existen sin embargo algunos aspectos a tener en cuenta para hacer un crucero embarazada. Así, por ejemplo, es posible que, como en el caso del resto de pasajeros, se puedan padecer mareos al navegar en barco. Es recomendable consultar al médico sobre cuáles son los medicamentos o remedios que se pueden aplicar.
Hay que tener en cuenta también que es posible que requieras de los servicios médicos a bordo y esto tendrá un coste adicional. También en los diferentes destinos en los que haga escala el barco podrías acceder al servicio médico del barco. Es recomendable comprobar este aspecto previamente.
De modo que se recomienda ser precavido y antes de salir de viaje pedir al ginecólogo una carta que resuma el historial y un informe con los datos clínicos del embarazo por si en algún momento nos tiene que atender otro médico. La documentación de los seguros médicos y de viaje también es importante que la llevemos con nosotros.
El barco suele contar con múltiples enclaves destinados al descanso, por lo que es muy cómodo para no cansarse demasiado y para estar tranquilo y relajado. Al tiempo, dispone de muchas zonas para caminar, por lo que es posible mantener la forma y realizar paseos. Es importante llevar calzado cómodo y tener en cuenta la necesidad de hidratarse convenientemente.
Antes de embarcar en el puerto de salida es habitual tener que hacer un desplazamiento en avión. A las mujeres embarazadas se les recomienda elegir asiento de pasillo para poder levantarse con frecuencia y realizar breves paseos que contribuyan a mejorar la circulación sanguínea.
Tanto para el crucero como para el avión conviene disponer de un documento firmado por el ginecólogo en el que se especifique el período exacto de gestación y la correcta marcha del embarazo. En el caso de viajar a destinos que requieran vacunas conviene saber que algunas de ellas están contraindicadas en el embarazo. Además, en caso de contraer gastroenteritis del viajero, el riesgo de deshidratación es mayor en el caso de mujeres gestantes.